viernes, 29 de mayo de 2009

El mercado de Cabimas de 1946

Alli en el mercado ibas a hacer tu compra, y cuando venias cargado de bolsas, con carne, recao de olla, o cualquier otra cosapodias llegar a la Refresqueria Madrid, de Antonio Piñero, donde te podias tomar un "Levantón" a base de ojo de buey y otras mescolanzas.

Te podia llegar "Cuatrocientos" (Alberto Leal), a ayudarte a cargar las bolsas, y tambien ayudaba haciendo mandados a los comerciantes. Su apodo era porque el decia que te cobraria 400 bolivares, que para la época era una suma astronómica. A la final aceptaba lo que le dieras, que igual iba para comprar una botellita de ron.

A las dos de la mañana llegaban las piraguas al muelle a desembarcar las mercancias y la fila de camiones y carretas esperando a cargar lo que llevarian a los comerciantes del mercado.

Y si estabas de suerte, podias escuchar a "El Caimán", Florencio Quintero, tocando el saxofón.

Margarita Soto. La comadrona más buena.....


Margarita Soto nacio el 19 de junio de 1917. Fue conocida por su vocación de servicio y por haber atendido unos 5000 partos, según Luis Guillermo Hernández y Jesús Andrade Parra.

Fue fundadora de la Casa Maternal Infantil de Cabimas en 1940. Pintora. Fue alumna del maestro Vicente Rojas, y actuo en teatro bajo su dirección, en las obras "Simón Bolívar", que se realizo en un templete detrás de la catedral y "Doña Rosa", que fue en el Cine Variedades. Sin embargo se alejó de las artes por 42 años para dedicarse a la labor de partera.

Atendió el alumbramiento de los primeros siameses de Cabimas, en la clinica Dr. Jose Gregorio Hernandez.

Cuentan que cuando tenia que atender un parto, se movilizaba en burro, bicicleta, camión, lo que fuera con tal de llegar, a cualquier hora, del dia o la noche. Muchas veces, solo recibia las gracias de los familiares, con escasos medios económicos. Lo único que exigia era que le avisaran con tiempo, que ella iba a ser la partera.


Posteriormente, debido a un accidente que lesionó uno de sus brazos, decidió retomar su vocación artística. En sus pinturas narró motivos cotidianos, sucesos de su entorno, las fiestas religiosas, las ferias y los temas históricos.

Particularmente su trabajo está caracterizado por la presencia de niños, de lo infantil, lo cual se refleja en casi todos sus personajes. Asimismo, en sus cuadros predomina el uso de los colores puros, especialmente el azul y el amarillo, con los cuales lograba matices que le imprimían una atmósfera de júbilo a las escenas descritas.

En 1984 realizó una muestra individual en la Casa de la Cultura Juan Félix Sánchez, en Mérida. En 1987 formó parte de la exposición Pintores de Cabimas y de la I Bienal de Arte Popular Bárbaro Rivas, donde obtuvo el Segundo Premio; ambos eventos realizados en el Museo de Arte Popular de Petare, en Caracas.


En 1988 participó en el Salón Nacional Cervecería de Oriente, en Barcelona (estado Anzoátegui), y en el Salón Nacional de Artes Plásticas, en la sección Arte Popular, en el Museo de Arte Popular de Petare, en Caracas.

Al año siguiente participa en la II Bienal Bárbaro Rivas, y en 1992 obtiene el Premio de Pintura en la III Bienal Bárbaro Rivas; eventos realizados en el Museo de Arte Popular de Petare, en Caracas. A finales de ese año participa en la muestra Imágenes del Genio Popular, organizado por la Galería de Arte Nacional, en Caracas, con el patrocinio de la Fundación Bigott. Sus piezas están incluidas en las colecciones de la GAN, el Museo de Arte Popular de Petare y la Fundación Polar.


Fue inmortalizada por "Neguito" Borjas, en su gaita "Punta Icotea".

Falleció el 10 de octubre de 1994. Cuatro años después de su muerte fue inaugurada la Casa Museo en su honor.

domingo, 24 de mayo de 2009

Bernardo Bracho. El gaitero indomable

Bernardo Bracho nacio el 27 de Julio de 1925 en Punta iguana. Trabajo como obrero de limpieza en la Creole. Se mudo para Cabimas y se caso con Andrea Dawidson. Tuvo ocho hijos, todos musicos. Bernardo Albenis, Elena Ines, Enrrique Benito, Marlon Alan, Sorena, Rubia Margarita, Gustavo Jesus y Cesar Augusto.

Se liga a la gaita cuando conoce a su amigo y posterior compadre, el compositor "Chinco" Rodríguez.

Cuando salia de Creole, se iba con "Chinco" a las enramadas de Punta Icotea, el bar de Ovidio, o algunas casas de Ambrosio, donde se formaban algarabias debido a la improvisación al gaitear, cuando pasaban pañuelos a quien le tocaba liderar el canto.

"Chinco" no sabia leer ni escribir y Bernardo le transcribia sus composiciones, y cuando aprendió
a hacerlo, a Bernardo le quedo el gustico de la composición.

Entre versos y caña, empezo a llegar a deshoras a su casa.

LLegaban abrazados y tocaban la puerta de la casa, y "Chinco" decia:

"Abrí la puerta Andrea,
sin despertar a los muchachos,
que aqui te traje a tu Bracho,
con una solemne pea."


La pasión por cantar lo condujo a renunciar a la industria tras 10 años de labor. Ingresó a las filas de la agrupación que hoy es Patrimonio Folclórico Musical del Zulia y Cultural de Cabimas: Barrio Obrero. Ambos se necesitaban. Ellos impulsarían el grupo con la danza Así es Maracaibo, compuesta por “Chinco” y cantada por Bernardo, entre otras musas, mientras el comenzaría a ganar popularidad.

En su texto Historia de la Gaita, el escritor y compañero de tarima Ramón Herrera, destaca: “Barrio Obrero lo conoció en un concurso de gaitas de Radio Cabimas. Bracho formaba parte del grupo Ambrosio, semilla de lo que hoy se conoce como Gran Coquivacoa, e inmediatamente lo enfiló como charrasquero”. La gaitera Lula Silva tenía 13 años cuando Bernardo llegó al conjunto.
“Impactó por su forma de cantar. Era muy expresivo, casi indomable. Costaba que mantuviera una disciplina. A veces se aparecía con el uniforme que no era y no se cambiaba. Fue un gran integrante que encendía las tarimas”. Muchos fueron los triunfos que cosechó con ellos, a lo largo de 28 años. Pero luego tomó la decisión de irse a otra agrupación, Los Compadres del Éxito, con quienes gaiteó hasta que expiró.

Característico
Sancochero, bebedor, fiel, carismático y con poco fundamento para vivir: así era Bernardo. “Yo reconozco que papá no tuvo fundamento para algunas cosas, pero fue un gran hombre”, resume con melancolía su hijo mayor. Sus allegados lo recuerdan como una persona que no tenía apego por los bienes materiales. “Si ganaba tres lochas, tres lochas gastaba”, dice su comadre Lula.
Cuando hacía un sancocho, lo probaba mucho. Mencionan que una vez, de tanto hacerlo, se le cayó la plancha en la sopa.

De sus anécdotas más jocosas, destaca el día que llegó a cantar en casa de una familia zuliana adinerada. Al ver el techo tan alto exclamó: “¡Oh! Y nos va a caer un tuqueque...”

También sus compañeros gaiteros traen a la memoria cuando llegó a cantar a una fiesta de Lagoven. Sin prestarle atención a las miradas de los altos gerentes, sirvió en su plato tanta comida que después tuvo que dormirse recostando su cabeza en la mesa. Dijo: “La comida es para comer, no de adorno”.

El precio
“Para él la gaita fue su vida, pero para mí, la gaita fue una lidia. No sé si sea fuerte decirlo, pero... a lo mejor una equivocación que tuve que apoyar para hacerlo feliz. A mí no me faltaba nada cuando trabajó en la Creole, pero cuando dejó el trabajo para gaitear, vino una gran escasez. Yo tuve que ponerme a vender comida y a coser. Teníamos ocho muchachos que mantener y eso no daba dinero. Por medio de un doctor hice un curso de laboratorista y de eso vivo hoy, ¡menos mal! No he visto ni un centavo de las regalías por su obra. Solamente Fundagraez me da una ayuda mensual”.

Ser la esposa de uno de los patrimonios culturales de Cabimas no le dejó siquiera una casa propia. “Vivíamos como los bachacos: con los corotos en la cabeza porque siempre estábamos en viviendas de alquiler. Se murió sin tener un techo. En la prensa salió una publicación acerca de que nos regalaron un terreno, pero eso fue mentira”.

Para subsistir, Bernardo tuvo que trabajar como músico en la Casa de la Cultura, después inspector de obras en el Ince, vendió pescado en su vieja camioneta que colocaba en la esquina del estadio Venoil, y hasta vendía algunos discos de gaita para obtener alguna ganancia. De todo un poco para vivir ‘alcanzado’, pero gaiteando.
Despedida
Una aneurisma que comenzó a molestarlo en el 85 fue el aviso de que su existencia se estaba agotando. A sus 64 años —el 21 de octubre de 1989— un infarto no le daría más oportunidad de cantar.
Se encontraba grabando en Radio Libertad una gaita a Luis Hómez. En la consola sólo se escuchó un quejido. El apuro condujo a quienes estaban presentes a llevarlo a una clínica privada cabimense.
Había que depositar 30.000 bolívares, pero no los tenía y no lo atendieron.
Lo llevaron al Hospital Universitario de Maracaibo. Mientras llegaban los médicos que conocían su caso, se fue con Dios.

“Papá murió pelando, pero feliz. Él era un músico y a eso se dedicó”. apunta Bernardito.
Renato Aguirre, presidente de Fundagraez, menciona su aporte valioso: “Fue la columna cultural de Barrio Obrero y de la gaita zuliana”.

La despedida de Bernardo fue multitudinaria. La Casa de la Cultura de Cabimas se quedó pequeña. Ríos de gente lo visitaron.
Vecinos del sector recuerdan que por la cantidad de personas, parecía una fiesta de San Benito.
En su féretro, los gaiteros colocaban sus uniformes. La manera más sublime que encontraron para decirle lo valioso que fue.

Marielys Zambrano Lozada

"Mi limon, mi limonero, entero me gusta mas".. Henry Stephen

Henry Stephen cantante venezolano. Nació en Cabimas Estado Zulia, el 15 de Julio de 1943. Su nombre completo es Henry Augustus Stephen Pierre.

Se inicio como músico con el grupo bailable “Los Técnicos” y posteriormente formó parte del conjunto de gaitas “Los Blanco y Negro”.
En la década de los cincuenta, se inicia en la música rock con un grupo llamado Los Flippers. Luego con varios músicos crean Los Impala, banda que dio la proyección al rock venezolano en el mundo.

En 1965 debuta como solista en el programa de TV El Show de Renny, y sigue con Los Impala hasta 1966, cuando se lanza definitivamente como solista. El grupo curazoleño Los Honda lo acompaño en sus presentaciones. En 1968 impone su mayor éxito: Limón, Limonero (original de Carlos Imperial) con el que rompe todos los records de ventas y se convirtió en el primer venezolano en figurar en la lista de la revista Bilboard. Ese mismo año obtiene el sexto lugar en el Festival Interncional de la Canción en Barcelona, España, con el tema La Ciudad, y logro el cuarto lugar en el IV Festival Venezolano de la Canción Moderna, con el tema Un Hombre, Un Niño. Alterno con Aretha Franklin y Miriam Makeba. En 1969 logra el cuarto lugar en el Primer Festival de La Voz de Oro de Venezuela en Barquisimeto (Estado Lara). Se va para España y permanece allá cosechando éxitos hasta diciembre de 1970. En 1971 participo en el Primer Festival Mundial de Onda Nueva, en Sansorama '71 y luego en el VIII Festival de la Canción Venezolana. En 1972 se presento en Italia y en 1974 en Colombia. En 1974 recibió el Disco de Oro de la RCA española por vender un millón de copias de una misma canción: Limón, Limonero, de manera que se convierte en el primer venezolano en recibir tal distinción. En 1976 participo en el Festival de Viña del Mar en Chile junto a Rudy Hernandez. Luego desaparece por un tiempo de la escena musical y se dedica a hacer comerciales y a actuar en TV.

Renny Ottolina lo presentó como solista en el programa “Renny Presenta” con el tema “Please Release Me”. En 1968, Henry Stephen, fue contratado en España por RCA Victor, en donde participó en musicales y comedias de televisión, radio y en clubes privados logrando una receptividad en el público durante 6 años.

En 1974, Henry Stephen regresa a Venezuela, incursionando en la actuación de telenovelas, iniciando sus actividades en televisión, en dos telenovela: “La Vida de un Boxeador” y el “Mago de Oz”. Luego actuando en la telenovela La Encantada. El gran éxito musical de Henry Stephen en Venezuela fue Limón Limonero. En la actualidad continúa sus presentaciones con Los Impala y como solista. Exitos: Ella Es, Mama Rego Azucar En Mi, O Quiza Simplemente Te Regale Una Rosa, La Nave Del Olvido, Un Vaso de Vino, Feliz, Feliz, Carita Mimada, Yo Te Amo Mi País, Muchacha Solitaria, Te He Perdido, Mas Allá De La Eternidad, Eleonor, De La Forma Como Eres, La Carta De Perder.

Tomado de: www.rockhechoenvenezuela.com

Hablar de Henry August Stephen Pierre es hablar de gran parte de las raíces del movimiento rock en Venezuela. Henry Stephen comienza a dar sus primeros pasos en el naciente movimiento rock a finales de la década de los cincuenta. En la segunda mitad de la década de los 50 es miembro de la agrupación gaitera Los Blanco y Negro y para 1959 forma parte de una de las agrupaciones pioneras del rock en Venezuela: Los Flippers. El grupo desaparece en el año 1961 y algunos de sus integrantes se unen a músicos de otra banda que se había separado y conocida con el nombre de Los Impala. Para 1963 toman nuevamente el nombre de Los Impala y Henry Stephen forma parte de la primera banda de expansión internacional dentro del rock en Venezuela. Graban los álbumes Conozca Los Impala (1963) y Los Impala (1964). Tras está grabación decide iniciar su carrera como solista y graba cuatro temas en el EP Lord Henry (1966), al cual sigue Limón Limonero (1968). Con el tema que dio titulo a su segundo LP obtiene un gran éxito y el paso del tiempo ha transformado al Limón Limonero en un clásico de nuestra música. Con los álbumes El Rey Negro (1969), Un Vaso de Vino (1969) y Carita Mimada (1970) se cierra su ciclo más productivo como solista. A partir de la década de los setenta se mantiene activo dentro de la música, pero sus grabaciones son esporádicas; destacando los álbumes I Don´t Know Why (1982) y Salsomanía (1983); en este último incursiona en la música tropical obteniendo gran éxito. Obtiene un gran éxito a mediados de los setenta con la hermosa canción Te he perdido. Durante los noventa alterna su carrera como solista con presentaciones de reunión de Los Impala, grabando el álbum Los Impala (1996). Sus temas como solista han aparecido en numerosas recopilaciones y la historia otorga a Henry Stephen un lugar privilegiado en nuestra música por varias razones: uno de los pioneros de el naciente movimiento rock en Venezuela, miembro de una de las agrupaciones más importantes de rock en nuestro país, intérprete de un tema transformado en un clásico como lo es Limón limonero.

El "Negro de Oro", "El Rey de las Tamboreras". Nelson Martínez

Nelson Martinez y El Gran Coquivacoa


Nacido el 20 de septiembre de 1950 en Caripito, un pueblo de profundo sentir religioso, ubicado el estado Monagas; Nelson Martínez además de haber sido una de las voces más emblemáticas de Gran Coquivacoa, fue también compositor, locutor y represente de ventas de una conocida marca de máquinas de coser.

Conocido como “El Rey de las Tamboreras”. En la década de los sesenta integró de manera alterna las agrupaciones Los Corsarios y Gaiteros del Prado.

Su llegada a Gran Coquivacoa, en 1969, generó una de las épocas más productivas de tamboreras en la historia de la gaita zuliana.


Nelson Martínez compuso e interpretó para Gran Coquivocoa la “Tamborera N° 7” (Macario); “Parranda Oriental”, “Desde la Basílica”, “El Gran Gaitón”, “La traidora” y “Gaita a tambora”, “Señor Presidente”; entre otras. En 1973 alternó con Los Turpiales y Guasinca Zuliana. En la temporada 1991 formó Los Reyes de la Tamborera y también fue integrante del Super Combo Los Tropicales, La CIA y Banda Country.
tomado de Saborgaitero.com

Su voz grave pero tropical era muy guarachera, por ello se amoldaba con facilidad a los ritmos festivos y dicharacheros. De esas andanzas queda para la posteridad uno de sus mas exitosos temas: “El Inglesito”.

Junto a Santos Nucette, Martínez fue miembro fundador del Conjunto Coquivacoa, que luego se convirtió en una agrupación de referencia obligada en el mundo gaitero venezolano: “Gran Coquivacoa”.

Perteneció también a otras agrupaciones gaiteras como: “Los Corsarios”, “Los Reyes de la Tamborera”, “Guasinca Zuliana”, “Gaiteros del Prado”, y “Los Turpiales” de Nelson Chacín en Caracas al cual perteneció un año, debido a que los capitalinos sabían apreciar su arte y grabaría “La Casa de los Gaiteros” y “Son caliente”; entre otros.

Entre algunos de los temas que Nelson Martínez logró imponer podemos mencionar: “Gran Gaitón”, “Gaitón 2”, “Gaitón 4”, “Gaitón 5”, “San Benito”, “Macario”, “Fiebre en la Catedral”, “El Cholagogue”, “La traidora”, “Cuando yo me muera”, “Gaita Tamborera Nº 3”; entre otras.

A causa de la diabetes, “El Negro de Oro” Nelson Martínez murió el 15 de enero de 1.999. En el Zulia siempre se le recuerda y se le rinden honores por su herencia musical.

Fuente: Humberto Rodríguez e Israel Colina 2003
Instituto Municipal de la Gaita y el Folclor (IMGF)
Foto: alegriagaitera.com
Tomado de Ronda Gaitera.com

miércoles, 20 de mayo de 2009

La primera cabimense coronada Miss Venezuela





"Miss Venezuela 1974". Infinidad de portadas, reportajes y entrevistas plenaron las revistas y periódicos de este país. Las preferencias se cifraban entre Marisela Carderera Marturet, una niña rica representante del Distrito Federal y Neyla Chiquinquirá Moronta Sangronis, Miss Zulia. Llegó la gran noche del jueves 30 de mayo de 1974 y todas las candidatas dijeron ¡presente! en el "Club de Suboficiales", de Caracas. Tras tres pases ante el público, el jurado votó masivamente por la impactante muchacha de Cabimas, hija de inmigrantes italianos y así el Zulia vio coronada por primera vez a una representante suya como "Miss Venezuela". Las finalistas fueron: Alicia Rivas Serrano (Departamento Vargas), primera; Marisela Carderera Marturet (Distrito Federal), segunda; Gladys Marlene García (Mérida), tercera y Sikiú Coromoto Hernández Roldán (Yaracuy), cuarta. Las bandas especiales recayeron merecidamente en: Gladys García, "Miss Amistad"; Neyla Moronta, "Miss Fotogenia" y Sonia Fuentes Figueroa (Aragua), "Miss Simpatía". Neyla Moronta nació en Cabimas, Zulia, el 31 de octubre de 1953, bajo el signo de Escorpio, tenía 20 años de edad. Medía 1,69 m de estatura, pesaba 51 kilos, tenía el cabello negro y ojos verdes, grandes, de mirada penetrante. Estudiaba cuarto año de Odontología, en La Universidad del Zulia (LUZ). Fue al "Miss Universo 1974", en Manila (Filipinas). No figuró. En 1976 se casó con el italiano Donny Salvato. La pareja no tuvo hijos. Neyla incursionó en los años 80 como presentadora de TV. Fue la conductora de un espacio matutino, junto a Carlos Fraga, en RCTV y de "Clásicos Dominicales". En el 2002 supimos que se graduó de odontóloga en la UCV, se volvió a casar y se fue a vivir a Miami (USA). Su hermana Nilza Josefina fue Miss Zulia, en el "Miss Venezuela 1979" y quedó tercera finalista."

Diego Montaldo Pérez
BellezaVenezolana.net
Junio 2004

La primera zuliana que gano el Miss Venezuela fue Miriam Cupello en 1949.

La primera escuela Nacional de Cabimas

La Escuela Nacional Bomplant se funda el 1ro. de Octubre 1936. Fue la primera escuela nacional.
Las escuela toma su nombre de Aimé Bonpland, quien nació en Francia el 28 de agosto de 1778 y fue médico botánico y naturalista, celebre por la expedición a América que realizara con Alexander von Humboldt, con quien hizo valiosos descrubrimientos y personalmente clasificó las plantas en la selva del Orinoco.

Inicialmente fue bautizada Escuela Federal "Bonpland" para varones. Estaba en la calle Rosario, casa No. 36 de Cabimas, y su director inicial fue el maestro David Crescente Castillo. El subdirector era el maestro Vicente Rojas Quiroz y las maestras eran Maria Duarte de Fuenmayor, Ana Fidelina de Monasterio y Jacobo Montero. Arranco con alrededor de 80 alumnos.

Luego paso a la avenida El Muelle No.1 , en frente le quedaba la plaza Bolivar. Y el 1ro de abril de 1957 se mudo a su sede definitiva en las delicias detrás del Liceo Chavez, donde esta actualmente. La foto dice 1946. La casa de madera de dos pisos que quedaba al lado de la escuela todavia existe, y la sede original tambien.

El maestro Marcelino Avila fue director de 1941 al 1942. Luego Jose Rafael Barreto hasta el 15 de septiembre de 1943. Estuvo tambien Emiro Araujo Ortega y Alberto Acosta Salas, Anibal Perozo.bbbb

El lema de la escuela es:"Primero es el deber".

jueves, 14 de mayo de 2009

Quien fue Carmen Herrera?

Muchos vemos y escuchamos el nombre de la Parroquia del casco central de Cabimas. Carmen Herrera. Pero quien fue ella?

Carmen Herrera fue una luchadora social, y con Betilde Flores, Electo de Jesus Piña, y otros fundaron la Sociedad de Obreros del Bien, en 1933, (recordemos que en esa epoca no habia clinicas ni dispensarios ni hospitales en Cabimas).

Fue miembro del Comite en pro del hospital de Cabimas y trabajo como enfermera, sin cobrar sueldo.

Fue una dirigente social de muy valiente. Por eso se le dio su nombre a la parroquia del centro de Cabimas.

La primera Enfermera uniformada y la primera choferesa de Cabimas

En 1936, durante el gobierno del General Eleazar López Contreras hubo una campaña profiláctica. La primera mujer en vestir uniforme de enfermera en Cabimas fue Lourdes Cáceres.

La primera mujer choferesa de Cabimas fue Rosario Chacín.

domingo, 10 de mayo de 2009

Las Retretas en Cabimas

Casi en toda ciudad o pueblo de Venezuela, tenia su banda para tocar retretas los domingos. Sobre todo los pueblos andinos.Y Cabimas no se iba a quedar atras.

Aqui las tocaba la Banda 5 de Julio, dirigida por Cayetano Martucci, quien vivia en Maracaibo. Esta banda se creo en 1938 y tenia 23 integrantes. Las retretas se tocaban en la Plaza Bolívar, y se escuchaba música zuliana, valses, danzas y contradanzas.

La banda surge por iniciativa de Don Felix Durán y otros andinos residenciados aqui, quienes habían fundado la Sociedad de Consolidación de los Andes, con el propósito de crear la banda.

Los instrumentos fueron donados por el mismo General Eleazar Lopez Contreras, Presidente de Venezuela para el momento.

La Banda desapareció en la década de 1950, y ya no se oyeron más retretas en Cabimas.

Tuve la oportunidad de escucharlas a principios de 1970 cuando ibamos a visitar a mi abuelo en Rubio, Estado Táchira. Los domingos a las 6 de la tarde, llegaban los músicos a la Plaza Bolívar, y nos deleitaban con la música venezolana.

La imagen corresponde a "Los Antaños del Estadio" de Caracas.

Rafael Rangel

miércoles, 6 de mayo de 2009

Una Universidad para Cabimas y la COL

La Universidad Nacional Experimental “Rafael María Baralt” es una institución de Educación Superior enclavada en la Costa Oriental del Lago de Maracaibo que tiene como misión impulsar el desarrollo de la subregión a través de la preparación de profesionales para la industria, asimismo colabora con las comunidades en su crecimiento cultural y social.

La visión de la Universidad Nacional Experimental “Rafael María Baralt” es garantizar una mejor atención al estudiantado, brindando confiabilidad y calidad en los servicios que presta para que se sientan parte integral del sistema de estudios superiores.

El 20 de Julio del mismo año, Ricardo Hernández Ibarra, Guillermo Bravo, Edgar Vinicio Nava y Carlos Rodríguez Castañeda, son juramentados como Rector, Vicerrector Académico, Vicerrector Administrativo y Secretario, respectivamente. El 24 de Octubre de 1983, se inician formalmente las actividades Académico – Docentes.

El Proyecto Gerencia Industrial marca el inicio de la docencia activa, dicho proyecto se inicia con 120 alumnos y 15 profesores. 150 alumnos se inscriben en Abril del año 1984 en el Proyecto de Profesionalización Docente. La universidad comienza a crecer, en 1988 el Programa de Ingeniería de Mantenimiento comienza sus actividades con 100 alumnos, se abren las sedes Ciudad Ojeda, Los Puertos de Altagracia y Mene Grande.

En 1986 los Programas de Post-Grado e Investigación conforman parte de la estructura Académico – Docente de la Universidad Nacional Experimental Rafael María Baralt.

A inicios de 1988 se inició un proceso de consolidación institucional que transciende las metas primarias de esta casa de estudios superiores de la Costa Oriental del Lago. La matrícula aumenta geométricamente y de 370 estudiantes inscritos en su primer año, hoy cuenta con aproximadamente 10.400 entre Pre y Post Grado y una planta docente cercana a los 600.

La Universidad Nacional Experimental “Rafael María Baralt” es una institución de Educación Superior enclavada en la Costa Oriental del Lago de Maracaibo que tiene como misión impulsar el desarrollo de la subregión a través de la preparación de profesionales para la industria, asimismo colabora con las comunidades en su crecimientos cultural y social.

La visión de la Universidad Nacional Experimental “Rafael María Baralt” es garantizar una mejor atención al estudiantado, brindando confiabilidad y calidad en los servicios que presta para que se sientan parte integral del sistema de estudios superiores.

Esta institución nace con el Decreto Presidencial N° 1435, promulgado el 15 de Marzo de 1982, asignándole Personalidad Jurídica y Patrimonio propio. Su sede principal se ubica en la ciudad de Cabimas.

Tomado de www.unermb.edu.ve

El primer venezolano por el titulo mundial de boxeo.. era de Cabimas

Ramon "Ramoncito" Arias fue el primer venezolano en pelear por un título mundial de boxeo profesional, el 19 de abril de 1958 en el Nuevo Circo de Caracas, y aun hoy muchos no vacilan en señalar que era uno de los mejores "jabeadores" de la historia del boxeo, además de convertirse en uno de los primeros ídolos del boxeo criollo.

"Ramoncito fue el mejor jabeador de la historia, lanzaba series de hasta diez jabs consecutivos, y todos los pegaba", señala el promotor zuliano Ángel Atilio Leal.

Pepe Atilio lo representó junto con Rafito Cedeño. Era un verdadero ídolo, un boxeador con mucha clase, habilidades y coraje".

Ramón Arias nació el 17 de febrero de 1936 en Cabimas, en la urbanización Federación de Creole, en el sector La Salina. La urbanización donde nació es popularmente conocida como campo Amarillo. Lo bautizaron Ramón Segundo porque su papá llevaba el mismo primer nombre. Por esos días el padre de Arias prestaba servicios con el Grupo de Mecánica, en Creole, en el área de trabajo que se denominaba Lote 66, situado en punta Hicotea. El boxeador inició su primaria en la escuela Concordia, de Creole, nombrada después Pedro Julio Maninat y hoy administrada por Petróleos de Venezuela.

Fue el primer venezolano en combatir por un título mundial de boxeo profesional, cuando el 19 de abril de 1958 enfrentó al argentino Pascual Pérez, para entonces campeón mundial del peso mosca. Ramoncito ofreció una dura batalla, pero al final se impuso el argentino por decisión en 15 rounds.

Posteriormente, el 19 de agosto de 1961, tuvo otra oportunidad titular, en esa ocasión por el del peso gallo que estaba en poder del brasileño Eder Jofre, quien ganó el combate por nocaut en el séptimo asalto.

Su última pelea la realizó el 17 de noviembre de 1963, y perdió por decisión con el nicaragüense Eduardo Mojica, en programa realizado en Managua; ya no era el mismo, había perdido gran parte de sus condiciones.

Su récord muestra 50 peleas profesionales, de las que ganó 33, de ellas cinco por nocaut, perdió 16 y empató una. Casi todas sus derrotas ocurrieron en el final de su carrera.

Fallecio en Maracaibo en junio 2006.

martes, 5 de mayo de 2009

Compañías Eléctricas en Cabimas

La Compañia de administración electrica de Cabimas era la C.A. Electricidad de Cabimas.
Hubo un momento en que la CVF - CORPORACION VENEZOLANA DE FOMENTO otorga creditos a esta compañía.

Como no puede pagar, en 1949 es absorbida por la CVF y se convierte en C.A. UTILIDADES PUBLICAS DE CABIMAS (CAUP).

En octubre de 1958 se convierte en CADAFE (Compañia Anonima de adminstración y Fomento Eléctrico).

ENELVEN firma junto con las empresas CADAFE, EDELCA y Electricidad de Caracas el contrato de interconexión. Es la primera vez que ENELVEN participa en decisiones del Sistema de Interconectado Nacional.


1990. El gobierno estableció a ENELCO como una entidad legal independiente bajo la administración de ENELVEN, con la finalidad de unificar los niveles de servicio y las tarifas del estado Zulia. Para ese momento existía controversia con relación a las tarifas más altas para los clientes de la Costa Oriental que de ENELVEN.

Comienza a funcionar la tercera interconexión con el Sistema Eléctrico Nacional, a través de una línea sublacustre, entrando en operaciones la línea Peonías –Trinidad en 230 KW.

sábado, 2 de mayo de 2009

La irrealidad profunda de Lunar

Pintor nacido en Cabimas en 1949, por su carácter excéntrico y enigmático, hizo que su obra se inscribiera en la historia del arte venezolano como el gran inclasificable. Las imágenes de algunos cuadros las había visto en sueños. Muere de cáncer en un pulmón.

“Quería la perfección y me esmeraba en los detalles. Casi no dormía, ni comía, tratando de lograr esa perfección”, decía el pintor.El silencio de la noche, en casa de los Lunar, se interrumpe con el susurro insomne de Emerio Darío. La habitación se le ha convertido en un abigarramiento de columnas, túneles y escaleras que salen de la nada y no llegan a ninguna parte. El espacio es hermético, pero profundo y gris azulado como el océano. El sueño le ha dictado pauta para hacer sus pinturas.María Lourdes (Mariíta), su hermana menor, escuchó sus monólogos noctámbulos.

Era el año 1967, cuando apenas había dejado el oficio de hacer letreros y la creatividad inconsciente comienza a robarle el sueño.Ya a las 3:00 de la mañana, Mariíta le preparaba el café que con su aroma tibio impregnaba la vivienda ubicada en el sector Las Cabillas, de Cabimas.

Darío (como ella solía llamarlo) se sentaba en una gavera de refrescos. Frente a él, la loneta de hamaca tensada con tachuelas en un marco de madera, era posada sobre un taburete.Mariíta colocaba un termo repleto de la estimulante bebida, a su lado, en el piso, donde también estaba la infaltable caja de cigarros. En el centro de la casa, una cava estaba siempre hasta el tope de cervezas, para que Emerio pintara bebiendo, sin más boceto que los que los de su memoria. Trazaba las líneas de un ambiente arquitectónico encriptado y enigmático, que luego coloreaba con esmalte de aceite —también llamado pintura industrial—, que separaba y mezclaba en frascos de mayonesa y disolvía en kerosén. “Al principio quería pintar como los pintores del Renacimiento. Quería la perfección y me esmeraba en los detalles. Casi no dormía, ni comía, tratando de lograr esa perfección”, le dijo con su voz de murmullo a José Gregorio Marcano, un sobrino que le hizo una entrevista inédita como parte de sus prácticas de periodismo.. . .En la misma calle donde estaba la casa de los Lunar, vivía la familia de la pintora Flor Romero y, su esposo, Carlos Contramaestre invitó un día a Oscar González Bogen a tomarse una cervezas en el abasto de Manuel Esteban Lunar, padre de Emerio.

Cuenta Manuel Marcelino Lunar, hermano mayor de Emerio, que ambos pidieron ver las obras. González Bogen sorprendido por la calidad de los trabajos le pidió a Lunar que le hiciera un retrato.“Como lo advirtió el propio retratado, el personaje era un doble del artista personificado en la oscura figura del cuadro (...) más la presencia de pisos suspendidos y columnas provistas de gradas. Una existencia afuncional del espacio arquitectónico”, describe Juan Calzadilla en su libro Emerio Darío Lunar, texto dedicado al artista.Pero realmente lo que descubrió a Lunar —asegura Calzadilla— fue participar, animado por González Bogen, en el Salón D’Empaire de 1969, donde obtuvo el premio de la Universidad del Zulia.“Después de eso, se hizo la primera exposición individual en Caracas, en el Ateneo, donde la élite de la capital le compró todo y desde allí se fueron regando sus pinturas por todo el país y hasta en el exterior”, dice Manuel.En esas exposiciones, Sofía Imber se interesó por él, preguntó dónde vivía y fue a Cabimas. “Cuando lo conocí, comprendí que tenía una gran sensibilidad. Me mostró cómo hacía sus cuadros. La gente lo admiró por su manera de expresarse”, contó Imber, quien además le ofreció atención psiquiátrica en la clínica El Peñón, de Caracas, pues Emerio padecía de esquizofrenia.“Lo ayudé porque lo estimaba. Aunque por todo ser humano habría hecho lo mismo. Pero cuando se trata de una persona que está desesperado dentro de sí mismo, sentía que había que hablarle de otra manera y no de cuánto vale su cuadro, sino como un creador. Entonces se sintió comprendido”, comentó Imber.. . .Al difundirse los cuadros fueron calificados como: arquitectónicos, metafísicos, renacentistas, neoclásicos y surrealistas.Karin Jezierski, en Cuadernos Lagoven (1995) asegura: “Él supo rehuír a todos los enfoques, porque su obra no se amolda a ninguna clasificación y se inscribe en la historia del arte venezolano como el gran inclasificable”.Lo más insólito es que en una Cabimas llena de resolana, una costa poblada de torres petroleras y un rubor que en los frentes de las casas reflejaba el fuego de los mechurrios; nadie sabe de dónde sacó Lunar los colores fríos; atribuidos por él, a la muerte.“En la familia no hay artistas, ni libros de arte.

Nunca fue a una escuela de pintura, ni frecuentaba museos, pocas veces salía de Cabimas y de su casa. Pero creo haber visto en casa de abuelo algunas revistas con pinturas del renacimiento”, explica José Gregorio. La soledad que impera en la obra de Lunar es también una proyección de su vida.“Aunque somos cuatro hermanos: Manuelito, yo, Emerio y Mariíta.

Desde niño él siempre estaba aparte. Jugaba a hacer cosas. Hacía trampas para cazar pajaritos y cuidarlos”, cuenta su hermana Victoria María.En el empeño de hacer, abandona los estudios al llegar a sexto grado, para “hacer cosas”.“Si pasaba las materias era porque Mariíta le hacía las tareas. Además se ganaba a las maestras pintándoles las carteleras” asegura Manuel.“Como a los 18 años le dio por hacer sus camisas. Las que tenía las deshacía para sacar patrones, y las hacía en tela negra o marrón”, recuerda Victoria. “También fabricaba muebles en madera. Y cuando vio las paredes de la casa vacías comenzó a pintar paisajes y reproducciones de fotografías.

Así fue como comenzó a pintar, a los 26 años, en 1966”, dice Manuel.. . .Ya en 1980, la fama de Emerio Darío estaba en el tope y, a diario, era visitado por artistas, periodistas, estudiantes y curiosos.“No salía a vender sus cuadros. La gente iba a su casa a comprarlos. Él ponía el precio y si le pedían una rebaja, se daba la vuelta y se iba”, cuenta Andrés Chávez, un amigo de Maracaibo que se encargó de revender sus trabajos. “Pero de vez en cuando, las crisis de depresión le impedían recibir visitas”, recuerda Victoria.Las fiestas en los bares de donde sacó la mejor inspiración por las mujeres que pintó, se hicieron cada vez más frecuentes.

“Cuando iba a esos sitios se perdía. Lo veían en la calle con la melena y la barba hasta el pecho y le decían ‘El loco de Las Cabillas’. Pero lo traían a la casa, porque era muy decente, ni hablaba. No parecía de este mundo”, dice Victoria.

Mariíta, recuerda que en su bonanza, Emerio la ayudó a pagar los estudios de sus hijos. Me decía: ‘Yo no tuve hijos porque si me salía loco, iba a tener que trabajar y no hubiera pintado. Pero no te preocupéis hermana, que yo te voy a ayudar”. “En 1990 se le diagnosticó cáncer en un pulmón. Decidimos no decirle nada, para que no recayera en las depresiones. Me preguntaba: ‘María me duele la espalda, decíme si tengo algo malo...”.

José Gregorio recuerda que él siempre supo que moriría joven y decía: “Estoy satisfecho con mi vida. Todo lo he hecho ya... Que la gente me recuerde por mis cuadros. Como persona, me da igual que me recuerden o no”.“Tuvo que dejar de beber, fumar y pintar, porque el olor de la pintura lo asfixiaba. Permanecía en el cuarto y con pinceles imaginarios hacía como si estuviera pintando las paredes”, cuenta Mariíta llorando, como si lo viera.

Manuel narra la despedida: “Dormíamos todos juntos en un solo cuarto para no dejarlo solo. Era tan inseparable de Mariíta que el 22 de noviembre, el mismo día del cumpleaños de ella, tosió y se quedó como ahogado. Corrimos a socorrerlo, y en brazos de Lisbeth (hija de Mariíta) y María Victoria (mi hija), quedó así calladito como era él. Cerró los ojos”.

Yesenia Rincón Castellano Panorama Digital, 2007

viernes, 1 de mayo de 2009

2 de mayo de 1959. Inundacion de Tierra Negra.


La noche del 1ro de Mayo de 1959 aproximadamente a las 11:30 pm se inicio una tormenta con fuertes vientos, relampagos y agua pareja. Dicen que llovio como por 6 horas. Me cuentan que por detras de la hoy Av. Carnevalli pasaba una cañada por donde bajaban las aguas que caian, pero se obstruyo con un colchon, lo que propicio su desbordamiento.

Esto hizo que se inundaran los sectores de Tierra Negra, Campo Elias, Guabina.

El presidente del Concejo Municipal, German Rios Linares, activo un plan de emergencia, y se dispuso trasladar los damnificados a la sede del SOEP. En este trabajo ayudo mucha gente y algunos luchadores locales como Carmen Herrera, Jorge Hernandez (Presidente del SOEP), Eduardo Nava Espina, Dario Suarez Ocando, Betilde Flores de Batista, Carlos Tarre Murzi, Hugo Largo comandante de la GN, y Donald Benceocrof gerente de Creole. Tambien instituciones como el Rotay Club, Club de Leones, La Sociedad de Obreros del Bien, y Asociacion de Comerciantes Mayoristas.

Paises como Mexico, Colombia, Costa Rica y Cuba enviaron ayuda. De hecho EL 28 de mayo de 1959, en Cuba sale en gaceta, la Ley No. 338: "Se concede crédito extraordinario para socorro de los damnificados por inundaciones en la población de Cabimas, capital del Distrito Bolívar, Estado Zulia, en Venezuela, por un valor de 20 000 pesos para compra de medicamentos y víveres, todos de producción nacional. "

Rafael Rangel

La Cienaga, era una gran extensión de terreno ocioso que existía allí donde los muchachos de la época cazaban machorros, pájaros, elevaban volantines, se hacían carreras de burro, la cucaña, metras, trompo y hasta la quema de Judas se hacia allí. También servia de estadio para jugar las famosas “caimaneras” de béisbol.

Estas se realizaban en las tardes y sábado y domingo todo el día y se hacían apostando dinero. Allí jugaron peloteros que dieron la talla en el béisbol profesional venezolano y doble AA del Zulia. Se hacían encuentros entre equipos de otros sectores con los locales que eran estructurados con peloteros de tierra negra, miraflores y centro de Cabimas.

El terreno estaba ocioso, por que era muy bajito, era una depresión y debido a esto las aguas de lluvia de las zonas aledañas terminaban allí inundando todo el sector de allí el nombre de la Cienaga.. El gobierno había construido con una tubería de 24 pulgadas de diámetro, un drenaje para paliar esa situación y lo construyeron en línea recta por toda la calle Paez hasta Las Tierritas, que son los palafitos que están en la orilla del Lago.

Siempre el primero de Mayo, día del trabajador caía un aguacero sobre Cabimas, pero ese año, 1959, se prolongo lloviendo demasiado y encontrándose con que alguien había botado un colchón en la “boca del Tubo” tapando así la salida del agua de lluvia. Siguió lloviendo y el agua sin salida inundo toda la zona.

La primera ayuda que llego fue la local, los bomberos de Cabimas fueron los que quitaron el colchón y el agua empezó a fluir, pero era mucha agua acumulada en todo el sector y el pequeño tubo no daba abasto. La descarga era muy lenta. Llego personal de las compañías petroleras con bombas de achique, plantas eléctricas portátiles, hasta que varios días después todo volvió a la normalidad. Se recibió ayuda nacional e internacional para los damnificados que fueron reubicados en unas barracas de paredes de zinc y techo de zinc que fueron construidas para ese fin y que el sector recibió el nombre de “La Nueva Cabimas”. Posteriormente allí construyeron una urbanización.

Allí las autoridades, vieron la necesidad de ampliar el tubo de drenaje y pasaron varios años cuando se construyo un túnel de más tamaño, de forma rectangular, con dos metros de alto y tres de ancho siguiendo la misma ruta por toda la calle Páez hasta la orilla de la playa.

La Cienaga seguía siendo un terreno ocioso, baldío y luego de construido el nuevo drenaje ya no existía el riesgo de inundación, la gente lo invadió y construyeron sus viviendas y el “tunel drenaje” como es grande sirve ahora de guarida de gente ociosa y de malas acciones.

Nelson Marcano Urribarri